Cuando un estudiante acaba la carrera o está prestes a finalizarla muchas cuestiones se le vienen a la cabeza.
Un recién graduado, desea poner en práctica todo lo que aprendió y se hace preguntas como: «¿a dónde voy a ir?», «¿A quién debo buscar», ¿Cómo empezar? Muchas de estas respuestas simplemente llegarán con el tiempo, buscando informaciones y hablando con personas con más experiencia (amigos, profesionales y profesores).
Si has acabado la carrera de terapia ocupacional, reserva un momento para leer lo que te pondremos aquí, seguramente te será más útil de lo que imaginas.
1 – No esperes a que la información «caiga del cielo»: Intenta siempre despejar todas las dudas antes de iniciar cualquier relación profesional, como, “fecha de inicio”, “sueldo”, “Valor por paciente o por turno trabajado”. ¡Sin vergüenza, ni subestimación!
2 – Busca referencias profesionales: Si recibes una propuesta de una clínica o residencia, busca al profesional que le precedió y pregunta sobre la dinámica de la institución y la experiencia personal en ese contexto: “Cómo es la relación con los demás profesionales”, “Qué le hizo salir” e información como el cumplimiento de plazos, etc. Las preguntas deberían ayudarte a conocer el entorno de trabajo, que puede incluir los desafíos que encontrarás, ¡por supuesto!
3 – “Clinicar” no siempre es el camino: Hoy hay muchos profesionales de terapia ocupacional que trabajan con investigación, con información digital de salud, (por ejemplo aquí en Reab) y también hay otras posibilidades de trabajar con Terapia Ocupacional además de las clínicas… como por ejemplo en las escuelas, gestión u otros contextos empresariales.
4 – Puede que aún no sepas lo que quieres: ¡Cálmate, no todo está perdido! Permítete experimentar y enamorarte, esto es lo más interesante de esta profesión, sabiendo que es en todos los contextos y edades, definitivamente te identificarás con alguna área.
5 – Tendrás la sensación de que no sabes nada: En las primeras semanas estarás solo, solo tú y el cliente / paciente y esto puede ser desafiante, pero es solo el primer susto, hasta que todo se estabilice dentro de ti. Invierte en actividades simples y no dejes de estudiar. La graduación ofrece solo una pequeña parte del mundo que es la Terapia Ocupacional, hay mucho por aprender y ofrecer cada día.
6 – No es necesario imprimir una tarjeta de presentación: Su mayor (y mejor) tarjeta de presentación son las personas, así intenta siempre dar lo mejor de ti en relación al servicio que ofreces y seguro recibirás buenas referencias por la profesionalidad y calidad de tus servicios.
7 – No intentes ir siempre contra la corriente: Siempre hay determinados procedimientos o jefes que pueden que no te gusten. Busca disfrutar de lo que haces. Por eso es importante que identifiques e inviertas tiempo en lo que te gusta.
8 – Busca personas con más experiencia: El entorno profesional está lleno de «novedades» que, muchas veces, no encontramos durante el curso de graduación. Cotidianos de autónomos, burocracias, como emitir recibos, abrir clínicas o algo así. Busca profesionales que lleven más tiempo en el mercado e intenta siempre aclarar tus dudas.
Estar desempleado es raro en el sector, hay tantas especialidades donde se puede trabajar como terapeuta ocupacional. Infelizmente la cuestión es que no siempre son bien pagados, y hay mucha lucha por mejores condiciones de trabajo. Pero un tema de cada vez. Si esto es lo que te apasiona, sigue tus sueños y seguro se te dará bien.
¿Algún recién formado que quiera aportar más consejos? Déjalos aquí en los comentarios, ¡tu opinión siempre es bienvenida!